Una sinfonía desarmoniosa, de amor y deseos. Perdidos encontrados. Atorados con pensamientos que atraviesan el espacio tiempo. Aceleran los látidos de congoja y acongojan las gaviotas, de una nota de derrota.
Las olas rompen la arena en la playa, con tu sonrisa pendiente, en la marea obediente. Cada sol y cada sombra cada verano como otra polaroid de la misma locura extraordinaria.
Recordar - sábado, veitiseis de octubre de 2013