Invierno 2001

Me levanto a la mañana escuchando, la miseria cotidiana.
Rápido desayuno y a correr que el tiempo es la amenaza.
Ficho tarjeta y bienvenido a la prisión.
El saber es la prisión del año 2001, la ignorancia libertad.
Una rutina hasta mediodía, historias viejas para la tarde.
Proyecto del proyecto de proyectar nada con nadie.
Para el anochecer, humedad.
Retraso de ocaso y un retazo de ansiedad.
La tele dijo nada más y ahora, hasta mañana.

sábado, veintiocho de julio de 2007

Granizo

El hielo cae del gris cielo. Tras los vidrios, purgando a los hombres, golpeando el pavimento. Entonces la ciudad se llovió de blanco, se escarcharon los árboles con las piedras y el viento. Organizaron un nuevo ruido cual cascote de cemento. Rebotan, en primera fila; la goma las disparse y el agua las invoca. Es una tarde haz de luz moldeada en la memoria.

miércoles, veintiséis de julio de 2006

Final del juego – re versión

Hubo una vez una pelota casi gol, que dió en el palo, que nunca entró. Un centro que envié, una hinchada que corrió, un penal que no existió. Un arquero que ríe, un cabezazo que erró. Personajes secundarios de un momento, ya pasó. Un equipo no abandona, y el partido terminó.

Línea mágica en el área de este sueño. Tiro libre desde el borde, rozando el arco del amor. El silbato del final, marca un tiempo de añorar y es tremenda desazón. El lujo ya no se detiene, otra copa se perdió. Otro agridulce desenlace cuenta a hoy de este baión. Tanta gloria y tanto orgullo, entremezclados en error.

Ese día Deportivo Ilusión descendió del torneo de Nunca Jamás, ya no tiene vuelta atrás. Gana y pierde repechajes, como un sueño sin robar. El único plantel que gana será la realidad.

 lunes, diecisiete de octubre de 2005

Carta a un fantasma S.A. – re versión

Ahora que es de noche, me veo en la obligación de contarte que si existió un tiempo de Luna, de estrellas, de Sol. No fue hace tanto, un verano casi invierno. Te comento que era hermoso, también difícil, tan lleno de llanto, pero hermoso. Esos días eran míos, fueron tuyos y son nuestros nada más. Apostando siempre al dieciocho, ¿me miento a mi? ¿te miento a vos? Tal vez nos mintamos tanto los dos. Fui egoísta, mal por mal es lo peor.

Ya se que me llevé mucho, y me olvidé un resto en el cajón. Si pensás volver, algún día y si podés, traémelo.

 lunes, diecisiete de octubre de 2005

Ya no estás

Te veo apagarte, despacio, de a poco.
Colgarte de algo, peleando y luchando.
Con tu final ya previsto, querer despegar.
Cada momento de vos se va en tu voz.
Triste destino de algo que elegiste.
Una despedida que nunca ha sido.
Una pregunta que no podrá contestarse.
Desvanecerte de a poco, cayendo en silencio.
Como una rosa sin pétalos que seguirá brillando.
Tiñéndose de negro, volando a ningún lado.
Sumándote a este cero que no vuelve a empezar.
Para dejar de ser amor, siendo más que un recuerdo.
Con tus destellos de desesperación, desapareciste.
Dejando todo el humo que cubre tu espacio.
Obligándome a jugar sin saber perder.
Sabiendo que nunca más voy a ganar.
Desde arriba, me empujaste, cuidaste, sonreíste.
Porque te veo irte, y no volverte.
Mientras tanto, me siento para siempre a verte apagar.

 jueves, nueve de octubre de 2003